viernes, 7 de septiembre de 2012


La cantidad de jóvenes que se pierden en el alcohol y las drogas es alarmante. Diariamente cientos de muchachos se internan en el peligroso terreno de las cantinas y son poquísimos los que logran salir de tan abyecto mundo.
Miles de padres de familia atraviesan por un verdadero infierno sin lograr sacar a sus hijos del averno en que se encuentran.
En el hogar del alcohólico no hay más esperanza que la muerte.
Se comienza ingenuamente con una cerveza o un traguito y se termina ingiriendo alcohol con agua, en un proceso lento pero seguro de deterioro mental físico y social. La vida puede ser destruida y el dolor dejado en la familia difícilmente será superado.
Atravesé por el valle obscuro y sin futuro del alcoholismo y la drogadicción y se lo difícil que es   salir de allí.
En mi libro “Mi Vida en las Cantinas” publicado en amazon.com narro como comencé en ese mundo, algunas de las experiencias que viví y como finalmente salí. Leerlo será de ayuda para los que tienen hijos, verán en sus páginas, actitudes, acciones, complejos y traumas que los orientaran en el conocimiento de las inclinaciones de sus hijos, para así prevenir conductas nocivas en el futuro.

Mi vida en las cantinas
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